arte textil / textiles andinos

¡Que llueva! ¡Que la vida vuelva!

Mar azul del cielo
nuestros ojos están en ti,
que se llene de nubes negras
que el llanto de la Tierra
en lluvia la devuelvan.
¡Remoja! ¡Remoja! Gritan las aves con su canto
abriendo sus alas queriendo atrapar la vida.
El oso, el tigre, el kapibara respiran con dolor,
los bosques son ceniza,
la Tierra se termina de quemar.

Madre lluvia, lluvia buena
deja tus chorros caer,
el agua de la lluvia es vida
el agua pura es vigor
la madre tierra con su amor
de las cenizas se levante
que su aliento verde impregne
¡Que a la tierra la vida vuelva!

Lluvia suave, Lluvia buena

La lluvia está llegando
el cerro está tramontando
soplando junto al viento
lluvia suave de gotas finas
a la Madre Tierra está despertando.

Levanto mi rostro
la recibo con plenitud
su agua clara me acaricia
¡Qué alegría! Me llena de risa.

¡Que llueva para los gusanitos!
¡Que llueva para los gusanitos!
Canta alegre el pájaro chiwanku
El también, la lluvia está llamando.

¡Klack! ¡klack!
La rana María en el charco está cantando
Junto a la lluvia al sapo está esperando.
Lluvia suave, lluvia buena
la Madre Tierra en su regazo te recibe
en sus ríos corres
en sus mares te almacena.

¡Llueve! ¡Llueve! suplica el maíz
su espiga cobriza te ofrece
sus dientes blancos te sonríen.
¡Tack! ¡Tack! ¡Tack!
Gotas finas acarician en la chacra el maizal.
Lluvia suave, para todos lluvia buena.

¡Basta ya!

Basta ya de lastimar a la Madre Tierra
Basta ya de quemar bosques y animales
Basta ya de detener la vida.
Que los ríos corran
Los árboles regeneren
Las flores con el viento bailen
Las voces se escuchen con fuerza
¡Basta ya! ¡Basta ya de este dolor que quema!
¡Basta ya de tanta muerte!