Cochabamba

El amor de una mujer

Mi amado está llegando
para él me engalanaré
con mi blanca enagua
mi pollera colorada
mi manta verde
y mis trenzas negras.

¡Mírame! ¡Mírame!
dando vueltas como una rueca,
como un pimpollo en flor
me estoy adornando
para ti mi amor.

¡Cuidado amor mío me estés engañando!
¡Cuidado amor mío me hagas llorar!
No vayas mi corazón a lastimar
No vayas mi boca a envenenar
¡Mírame! ¡Mírame! contenta estoy
Mi amor para siempre te lo doy.

Lluvia suave, Lluvia buena

La lluvia está llegando
el cerro está tramontando
soplando junto al viento
lluvia suave de gotas finas
a la Madre Tierra está despertando.

Levanto mi rostro
la recibo con plenitud
su agua clara me acaricia
¡Qué alegría! Me llena de risa.

¡Que llueva para los gusanitos!
¡Que llueva para los gusanitos!
Canta alegre el pájaro chiwanku
El también, la lluvia está llamando.

¡Klack! ¡klack!
La rana María en el charco está cantando
Junto a la lluvia al sapo está esperando.
Lluvia suave, lluvia buena
la Madre Tierra en su regazo te recibe
en sus ríos corres
en sus mares te almacena.

¡Llueve! ¡Llueve! suplica el maíz
su espiga cobriza te ofrece
sus dientes blancos te sonríen.
¡Tack! ¡Tack! ¡Tack!
Gotas finas acarician en la chacra el maizal.
Lluvia suave, para todos lluvia buena.

¡Basta ya!

Basta ya de lastimar a la Madre Tierra
Basta ya de quemar bosques y animales
Basta ya de detener la vida.
Que los ríos corran
Los árboles regeneren
Las flores con el viento bailen
Las voces se escuchen con fuerza
¡Basta ya! ¡Basta ya de este dolor que quema!
¡Basta ya de tanta muerte!